La tecnología blockchain o cadena de bloques se fundamenta en una base de datos pública, compartida y descentralizada en la que se registran operaciones de todo tipo.
Funciona como un libro de contabilidad del que todos los ordenadores de la cadena tienen una copia y que, por tanto, un cambio en un apunte supone un cambio inmediato en todas ellas. Del mismo modo, para modificar un dato ya registrado habría que modificar al mismo tiempo todas las copias de libro, lo que resulta imposible.
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De esta manera, una cadena de bloques es un registro inalterable. Como además se utiliza criptografía para los registros, no se puede identificar quién ha realizado la operación ni desde dónde, por lo que garantiza la privacidad de los usuarios.
Para demostrar la viabilidad de la cadena de bloques se creó una moneda virtual o criptomoneda denominada bitcoin. Esta moneda sin soporte físico no está respaldada por ningún banco o entidad financiera, ni regulada por ninguna autoridad, pero garantiza la seguridad de las operaciones mediante su tecnología blockchain.
Tras la blockchain de bitcoin han ido surgiendo otras cadenas de bloques en el mundo que dan soporte a su propia moneda. Incluso hay cadenas de bloques que dan soporte a varias criptomonedas. Una de las más amigables es Ethereum, cuya principal criptomoneda es ether.
En estos momentos hay en el mundo unas 10.600 criptomonedas y la cifra no para de crecer. Las dos criptomonedas de mayor valor de mercado en noviembre de 2021 son bitcoin y ether. La primera tiene un valor de unos 1,1 billones de dólares y la segunda de unos 533.000 millones, menos de la mitad.
Sin embargo, las recientes evoluciones tecnológicas de Ethereum sitúan a su criptomoneda cerca de sus máximos históricos. Bien es verdad, que todavía bitcoin es más popular y tiene un mayor mercado, y tampoco se encuentra lejos de sus máximos históricos.
Dificultades de invertir en criptomonedas
Invertir en criptomonedas es complicado porque se trata de un mercado muy nuevo y no para de crecer. Se puede ganar dinero formando parte de una cadena de bloques y trabajando como minero o registrador de las operaciones de esa cadena.
Pero como la competencia actual es tan elevada, los ordenadores para minar criptomonedas son muy caros y el consumo de electricidad necesario lo hace poco viable. De hecho, para minar criptomonedas hay granjas o grupos de mineros, pues es la única manera de obtener rentabilidad.
Por lo tanto, para invertir en criptomonedas, la otra alternativa es comprar criptos cuando están baratas y venderlas cuando suben, como cualquier otro activo. Esto es posible cuando se produce la primera emisión de una moneda (ICO) o cuando por circunstancias de mercado está barata.
Esta es la gran complicación de invertir en criptomonedas: saber valorar lo que hay detrás de cada una de ellas (tecnología) y entender cuál va a ser más popular en las siguientes semanas o meses.
Como llegar a tener los conocimientos necesarios para adelantarse a los movimientos del bitcoin o el Ethereum es difícil, muchos inversores utilizan el análisis técnico para prever las tendencias en el mercado de las criptomonedas.
Pero tampoco es fácil ganar dinero así. Los conocimientos necesarios en análisis técnico para invertir en criptomonedas con éxito llevan un tiempo y son herramientas que utilizan muchos inversores a la vez en todo el mundo.
Tampoco todos los brokers online permiten que los usuarios saquen el máximo partido de las criptomonedas. Los mejores ofrecen CFD para invertir en criptomonedas y una formación clara y extensa para que los ahorradores conozcan la mejor manera de operar con estos activos.
Recordemos que las criptomonedas actuales solo son la punta de lanza de una tecnología más ambiciosa que podría acabar con la intermediación en muchas operaciones y que tiene por objetivo, por ejemplo, los contratos inteligentes o contratos descentralizados públicos y totalmente seguros.
